Se llama esperanza y está al alcance de todos

De todas las veces que voy andando por la calle (porque yo ando,no necesito coche,ni moto,ni mierdas) casi todas pienso en el riesgo que corro cada vez que cruzo un paso de cebra. Puede sonar gracioso de buenas a primeras,pero si te paras a pensarlo hay fondo,¡vaya que si lo hay! Algo tan corriente como pasar por un paso de cebra se puede convertir en una verdadera pesadilla. De repente cruzas,un coche arrolla todo tu ser,y ahí no hay mucho más que hacer,se ha acabado todo. Dramático,¿verdad? ¿O un golpe de suerte? Nunca. Una vida es muy preciada,no es sólo una mala racha,aunque a veces parezca serlo,una vida es un mundo,la mejor oportunidad que te han podido dar tu padre y tu madre. No hay nada más interesante que vivir,pero la verdad es que no hemos probado otras maneras de existir si no es viviendo. Ni 100 mil amores malos ni 1 millón de pér-didas de seres queridos nos pueden quitar las ganas de vivir. Siempre, escú-chame,siempre te esperará algo bueno,antes o después. Por eso vive con fuerza, no vaya a ser que cuando te quieras dar cuenta todo se haya ido al carajo.